Fue tan parejo como dramático el triunfo del mendocino Palmira sobre Olimpia en la definición por penales tras igualar 2-2 en tiempo reglamentario y no poder superarse en el alargue. Los penales le pusieron dramatismo a un gran partido que se jugó con el voltaje al máximo nivel. Que pudo ser para los dos, pero los certeros remates de Nicolás Olivi -anotó los dos- y la gran tarea del arquero Mauricio Aranda -la figura del partido-, pusieron paridad en la serie, y ahora todo se definirá mañana en Mendoza a las 21.30. El juego terminó con mucho nerviosismo, con la dupla arbitral Roberto González y Ricardo López escoltados por la policía. El principal motivo fue que en el último penal de la serie de cinco, Javier Morilla (Olimpia) anotó el suyo, pero López lo anuló porque no había dado la orden. Pero lo mejor de ambos se vio en el partido. Que fue de ida y vuelta, en el que Palmira fue más profundo y con llegadas claras. Mientras que Olimpia fue rápido para la contra. Nicolás Olivi abrió el marcador, Ginestar lo empató para los Turcos y Forto volvió a poner al mendocino arriba. Solera lo igualó en el complemento, que motivó los penales para que Palmira festeje y emparde la serie.