Cada día, mientras cabalgaba los 5 kilómetros entre los montes para poder llegar a la escuela, soñaba con viajar en avión, casarse con una mujer hermosa y, sobre todo, salir de la extrema pobreza en la que vivía junto a su madre y a su abuelo, allá en Las Lagunas, Sarmiento. Y todo aquello que parecía algo imposible se cumplió. Esta historia de superación personal pertenece a Leo Torres, un estilista profesional que abre academias de peluquería en diferentes departamentos para enseñar gratis este oficio y cumplir con un nuevo objetivo: "Ayudar a transformar el pasado, presente y futuro de los jóvenes" que, como él, buscan salir de la precariedad trabajando dignamente. Quiso contar su historia de vida para mostrar que pese a las dificultades, si hay voluntad, los sueños se hacen realidad.

Para Leo no es una vergüenza contar que cuando era chico muchas veces sólo comía un bollito de pan en todo el día o que en su casa secaban la yerba usada durante la semana para luego mezclarla con la menta que crecía a orillas de la acequia y así poder volverla a usar para preparar mate cocido. Dijo que recordar estas vivencias no le provoca dolor y que le sirve para ser "un agradecido de la vida". Y fue en parte por este motivo que comenzó a enseñar peluquería gratis. "Sé lo difícil que es ser pobre, pasar hambre y no tener recursos para cambiar de vida. Pero no hay que dejar de soñar y menos de luchar por cumplir esos sueños. Pensando en los chicos que están en esta situación y que no se animan a soñar es que decidí enseñarles peluquería gratis. Y esto que nació como una inquietud muy personal se terminó convirtiendo es una escuela solidaria que recorre la provincia", dijo Leo.

En 2019, el estilista abrió la primera academia gratuita de peluquería en Caucete y para alumnos sin distinción de sexo y sin limite de edad. Desde entonces amplió la oferta para enseñar gratis este oficio también en 25 de Mayo, Sarmiento y San Martín. Hasta el momento son 170 los egresados de estas academias y la cantidad seguirá creciendo. Actualmente hay 100 alumnos en las academias que funcionan en Caucete, Sarmiento y El Encón. "Me siento muy feliz de ver cómo con mi ayuda los chicos pueden cambiar su realidad. El 12 de julio egresarán 50 alumnos más y vamos a realizar un acto para entregarles los certificados. Estarán presentes peluqueros de otras provincias y habrá un desfile porque quiero que vivan a lo grande este momento que representa su logro personal", dijo.

RUMBO A LOS SUEÑOS

Leo Torres terminó el secundario y siguió trabajando en el campo junto a su abuelo. Mientras, pensaba qué podía hacer para salir de la pobreza. Fue una película la que le marcó el rumbo. Fue "No se metan con Zohan", un film donde Adam Sandler encarna a un exmilitar que logra cumplir su sueño de convertiste en estilista. "Cuando vi esa película supe que quería ser estilista. Pero postergué mi deseo por temor al qué dirán. Pensé que mis amigos iban a creer que era gay si estudiaba peluquería. Tonteras mías nada más, porque cuando me gradué fueron los que me aplaudieron de pie", dijo emocionado.

Decidido a seguir esta profesión, Leo le pidió a su abuelo que le regalara un par de vacas para venderlas y juntar algo de plata. Cuando la tuvo, viajó a Mendoza para estudiar peluquería. Y se graduó con honores por su entusiasmo y dedicación. Ese fue el primer sueño cumplido. Al poco tiempo cumpliría otro más, el de viajar en avión. "Como llevaba tiempo trabajando pude ahorrar plata y decidí ir a Buenos Aires para especializarme como estilista. Y viajé en avión", dijo sonriendo.

Tras su nuevo título y trabajar por un par de años en esa provincia, Leo comenzó a ganar prestigio y a participar en las "Expos" realizadas en La Rioja, Catamarca y Santiago del Estero donde formaba parte del staff invitado. Y por siete años fue el peinador oficial en los desfiles de moda organizados en Carlos Paz para cerrar la temporada de verano. Allí tuvo la oportunidad de conocer a varios famosos. "Esa fue una linda época. Conocí a Matías Alé, Ricardo Fort, Tito Esperanza y a muchos famosos más. Y tenía un buen pasar. Pero sentí que era hora de regresar a mi tierra y dar un poco de todo lo que aprendí", contó.

Ya de regreso en San Juan, el estilista concretó su tercer sueño. Se casó con una mujer hermosa con la que tuvo tres hijas. Pero el sueño terminó, según asegura, por causa de la solidaridad.

"Cuando mi esposa supo que iba a enseñar gratis peluquería nos separamos. Me dolió bastante, pero cada vez que veo la emoción de los chicos que asisten a las clases después de salir de la cosecha, siento que valió la pena el sacrificio", sostuvo el hombre para cerrar su relato.