Ayer se presentó en sociedad la Cátedra Unesco (uno de los brazos fundamentales de Naciones Unidas) y FADAH (Fundación Argentina de Ayuda Humanitaria) sobre el abordaje transdisciplinario de la violencia: una iniciativa para humanizar al mundo a través de reflexiones y acciones concretas en todos los ámbitos. Juan López, director de la Cátedra, y Raúl Fourcade, integrante del comité científico de la Cátedra en la Universidad Nacional de San Luis, explicaron a un auditorio muy heterogéneo los resultados de la experiencia.

Entre sus objetivos, figuran los de impulsar acuerdos entre instituciones de enseñanza superior de países industrializados y en vías de desarrollo, fortalecer redes entre estas instituciones y conformar centros de estudio con apoyo de la comunidad. En síntesis, generar y mantener acciones de formación permanente para un abordaje interdisciplinario de la violencia. Las actividades de la Cátedra, como fue anunciado, incluirán talleres y capacitación, además de jornadas de reflexión sobre la temática, cuya realización se programará oportunamente.

Usar la fuerza o la coacción de manera ilícita para obtener un beneficio o imponer un deseo. Tal la definición de violencia que los dos disertantes de la Cátedra Unesco trabajaron como eje de su exposición ante una sala colmada por profesionales de distintas áreas: trabajadores sociales, abogados, docentes y también legisladores nacionales que concurrieron a escucharlos. La actividad se realizó en el salón multiuso de OSDE, entidad que colaboró en la organización del encuentro.

El programa de Cátedras Unesco surgió en la década de 1990, con el objetivo primario de lograr la unión en redes de diferentes universidades del mundo, a fin de profundizar los conocimientos científicos en sus diferentes áreas. De allí que el programa se denominara Cátedras Unitwin, "uni" de universidad y "twining" de emparentamiento, unión.

En el caso particular de la Cátedra que ayer fue presentada en sociedad, su origen se remonta a los primeros años de esta década. "Con varias personas abrimos ámbitos de análisis sobre la violencia y trabajamos en acciones a largo plazo: concientización comunitaria, asesoramiento, capacitación a jueces, empleados judiciales, policías y también a padres, docentes y alumnos", explicó Raúl Fourcade, juez federal de la provincia de San Luis y docente de educación superior.

Entre los objetivos de aquellas primeras acciones, llevadas a cabo en San Luis, los iniciadores se propusieron diferenciar distintos tipos de violencia, lograr el reconocimiento social de la víctima y abordar aspectos de la violencia familiar, social, escolar y laboral. En este punto, Fourcade definió una "relación triangular" entre los actores involucrados en la violencia: "el agresor, la víctima y el espectador; en este último rol, todos hemos estado alguna vez", puntualizó.