Marcela Tedeschi Temer, la joven esposa del vicepresidente brasileño, se convirtió en lo más comentado en su país el mismo día, el pasado sábado, en que se celebraba la investidura como presidenta de Brasil de Dilma Rousseff.
Sin duda, la guapísima Marcela fue la gran protagonista del evento, quien se convirtió en el tercer asunto más discutido en las redes sociales, especialmente Twitter, informaron varios medios del país.
Vestida con una blusa marrón que dejaba un hombro al descubierto y una falda salmón, Marcela Temer, de 27 años, acaparó las miradas en los actos de investidura celebrados ayer en Brasilia y su indumentaria ha sido calificada como propia de una "diosa romana", por el diario O Estado de Sao Paulo.
Para la ocasión, Marcela Temer, 43 años más joven que su marido, que tiene 70, decidió recoger su larga melena rubia en una trenza.
Natural del estado de Sao Paulo, es hija de un empresario y una ama de casa. La joven se casó con Michel Temer en una ceremonia íntima en 2003 y actualmente la tienen un hijo de dos años.
La vice primer dama conoció a su actual esposo durante una convención del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), al que pertenece Temer, y su primer encuentro fue hace siete años cuando ella le pidió una foto en ese evento, y él a su vez le pidió su número telefónico. "La edad no es un obstáculo en nuestro caso", dijo Marcela Temer al periódico O Estado de S. Paulo, en comentarios publicados ayer. "Es como si Michel tuviera 30 años. Es gracioso decirlo, pero es verdad", aseguró.
Antes de su boda Marcela quería ser modelo y se presentó a varios concursos de belleza en los que fue elegida Miss Campinas y Miss Sao Paulo, aunque tras su casamiento se formó en Derecho.
El sábado estuvo en toda la ceremonia al lado de su marido: "Tuve mucha emoción, formé parte de un momento histórico, que es tener una mujer en la presidencia por primera vez. Admiro mucho a Dilma".
Marcela contribuyó a la campaña de Dilma Rousseff con unas declaraciones colgadas en la web oficial de la entonces candidata en las que defendió el papel de la mujer en la sociedad brasileña y se comprometió a contribuir en mejorar la situación del país.
"Las mujeres pueden mostrar que ellas actúan muy bien como amas de casa, madres, médicas, abogadas y presidentas. El Gobierno de Lula es realmente excelente y Dilma dará continuidad y mejorará todavía más el país. Tengo la seguridad de que Michel en conjunto con Dilma van a ayudar a esa mejora. Como viceprimera dama, esposa del vicepresidente de la República, quiero contribuir mucho para ayudar a nuestro país", razonó.
En tanto las comparaciones con la bellísima primera dama francesa, Carla Bruni no tardaron en llegar. Y su esposo Michel Temer fue consultado por medios brasileños sobre las posibles similitudes entre su esposa y Bruni, sobre eso dijo "no es Carla Bruni, nada de eso. Mi mujer es la madre de mi hijo Michel".