�Yo voté en contra de los tres proyectos. Fue una sesión llena de nerviosismo. El oficialismo presentía que no estaban los números. Eso pasa cuando las leyes no tienen consenso social. La tensión de la gente que estaba fuera del Congreso se sintió adentro, mientras se desarrollaba el debate. No se puede votar dos veces (en alusión al artículo 2). Cuando se votó a favor del artículo primero, el oficialismo no pidió votar de nuevo. El resultado que dio el tablero cuando se votó el artículo 2 fue de 128 diputados a favor. Ese resultado debieron respetarlo. En el texto del proyecto sobre Consejo de la Magistratura no se hacía alusión a capítulo y título. Si eso no se consigna, debe votarse artículo por artículo. En cuanto a Rossi, sentí compasión por él y un pesar enorme. El oficialismo debe garantizar el tratamiento de una ley tan fundamental como la que se ha tratado. Entiendo que estas cuestiones parlamentarias deben solucionarse en el Congreso y no en la Justicia. También es necesaria una reflexión del Gobierno para no sacar leyes tan forzadas.