Los sectores vulnerables son los que más sienten el impacto socioeconómico por la pandemia del coronavirus en el mundo. Pero no son los únicos ya que la crisis golpea en forma multidireccional a todos los sectores y una encuesta de Unicef Argentina revela los efectos secundarios del Covid-19 como la pérdida de ingresos, la inseguridad alimentaria, la falta de acceso a internet y computadoras para continuar con la educación a distancia o la violencia doméstica -ver Infografía-

Desde que se tomaron las medidas de aislamiento preventivo, en el 59% de los hogares se afirmó que los ingresos laborales se han visto reducidos: son 3,6 millones de viviendas relevadas en las que habitan 15 millones de personas. Este porcentaje aumenta al 62% en la Provincia de Buenos Aires, al 70% entre los perceptores de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y al 75% cuando son familias numerosas.

El 56% de las pérdidas de ingresos se deben a la caída en la actividad de venta ambulante, cuenta propia de plomería, albañilería, electricidad, changarín, etc.; un 15% porque bajaron las ventas, pedidos, etc., y un 12% por la reducción de horas de trabajo.

La pérdida de empleos promedio en el país es del 7% y llega al 10% en provincias del Noroeste Argentino (NEA).

"En este contexto, los programas sociales de transferencia directa son fundamentales y si bien no alcanzan a cubrir todas las necesidades, alivianan la situación de muchas familias", afirma Luisa Brumana, representante de Unicef en Argentina.

La "Encuesta de Percepción y Actitudes de la Población. Impacto de la pandemia", revela que desde que comenzó el aislamiento algún miembro del hogar recibió: 22% el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), 28% Bono AUH, 2% Bono Jubilados ,19% Tarjeta Alimentar u otros apoyos alimentarios.

El 84% de los hogares afirma no tener inconvenientes para acceder a las prestaciones.

Del universo que recibe la Tarjeta Alimentar el 93% afirma no tener problemas para su utilización. Entre los que afirman tener problemas la principal causa es la no aceptación de la tarjeta en comercios o la falta de comercios con tarjeta

El estudio advierte, además, que, pese a los impactos socioeconómicos, en el 83% de los hogares se considera que, si no hubiera cuarentena, hay un riesgo alto de contraer la enfermedad y los niveles de aprobación del aislamiento social son unánimes, incluso entre la población de 13 a 17 años, que apoya la medida en un 99%.

El informe también alertó que, en cuanto a las mujeres, el 2,4% declaró sentirse agredida o maltratada, lo que representa a 142 mil hogares. En el 72% de los casos fue por parte de las parejas y en el 28% restante por parte de hijos/as. En el 86% de los casos no se tomaron acciones: un 14% hizo la denuncia policial.

Por otra parte, en el 81,2% de los hogares las chicas y los chicos tienen actividades o tareas escolares, que en un 68% realizan junto a sus madres.

"Si bien buena parte de la oferta educativa circula en plataformas multimediales, un 18% de los adolescentes declararon no tener acceso a internet y el 37% no cuenta con Tablet, notebook o PC", especificó Unicef.

Entre los que sí tienen conexión, el 76% considera que está más tiempo frente a las pantallas respecto al periodo previo de aislamiento.

"Hay un alto nivel de preocupación en los adolescentes. Un 22,.5% de ellos dijo sentirse preocupado, 15% angustiado y 13% deprimido. Hay que estar atentos a la salud mental y a la contención de los más jóvenes", alertó Brumana.

Más del 50% de los adolescentes dijo que conversan con su madre estas situaciones, lo que derivó en que, cuando se les preguntó cuál era la fuente de información más confiable, un 66% dijo que los padres.

 

El seguimiento

Alberto Fernández recibió ayer por separado al grupo de médicos y científicos que lo asesora en la lucha contra el coronavirus y a referentes de movimientos sociales que están atentos al impacto social de la pandemia entre los sectores más vulnerables.