San Juan, 15 de octubre.- El Bastón blanco o "Bastón blanco para ciegos" es un invento creado por el político e inventor argentino José Mario Fallótico.
Cuentan los historiadores que el mediodía del 22 de junio de 1921, Fallótico vio a una persona, a la que identificó como no vidente, que se encontraba esperando por cruzar la esquina de la calle Medrano y Lezica, de la Ciudad de Buenos Aires. Fallótico ayudó al hombre, pero quedó obsesionado con una pregunta: ¿Cómo hacer para distinguir a un ciego y poder ayudarlo?
La idea siguió a este santafesino, que por aquel entonces vivía en el barrio de Flores en la Ciudad de Buenos Aires, hasta que dio con la solución: un bastón blanco serviría para distinguirlos.
Con esa idea, Fallótico concurrió hasta la Biblioteca Argentina para Ciegos y conversó con quien en ese entonces era el presidente, Agustín Ferregufo, quien dio la aprobación institucional para que el dispositivo se convirtiera en un instrumento de uso distintivo para las personas que no pueden ver.
Así nació en nuestro país el bastón blanco, y el primero en usarlo fue un señor llamado Fidel.
José Fallótico nunca patentó su invento, fueron los estadounidenses quienes se adueñaron de la novedad, cuando George Benham, presidente del Club de Leones de Illinois, propuso para uso de los discapacitados visuales un bastón blanco con extremo inferior rojo, a fin de que se les otorgue prioridad de paso.
La propuesta fue aceptada y en poco tiempo el uso de dicho elemento se hizo universal. “Como son los estadounidenses. Celebran el "Día Internacional del Bastón Blanco", pero no saben quién es el inventor”, dijo una vez Isabel Fallótico, sobrina nieta del inventor.
