“¿Alguien sabe lo que es la puna?”. La pregunta del gendarme, lejos de intimidar a los chicos de la escuela Provincia de Catamarca, en el barrio San Juan, hizo que se alzaran varias manos ansiosas por ser elegidas para dar la respuesta. Nadie quería quedarse sin participar de la charla informativa que dio ayer un grupo de efectivos de Gendarmería Nacional, sobre el Cruce de los Andes, con un valor agregado: los distintos elementos que se usan tanto durante el camino como en los diferentes campamentos. Por eso, cuando el gendarme preguntó si alguien sabía lo que era la puna, unos cuantos se apuraron en contestar que ‘es algo que te pasa cuando te empezás a sentir mal en la montaña‘.

La idea de contar a los chicos cómo se hace el Cruce Sanmartiniano y compararlo con las condiciones en que lo realizó el propio José de San Martín y el Ejército Libertador, surgió en la propia escuela. ‘Es una forma diferente de rendir un homenaje a San Martín. La intención fue que los chicos escucharan, de boca de los propios protagonistas, todos los obstáculos que tienen que sortear los expedicionarios por el mismo lugar por donde pasó San Martín. Y que puedan darle valor a tan grande hazaña‘, explicó Fanny Díaz, directora de la escuela Provincia de Catamarca.
Sentados en el suelo y muy atentos, los chicos siguieron cada tramo de la exposición sin perder ni un solo detalle. Cuando tenían alguna duda, preguntaban y hasta despertaron alguna sonrisa en los gendarmes con sus ocurrencias. ‘¿Es cierto que si uno come cebolla, no le hace mal la altura?‘, preguntó uno de los alumnos, recibiendo como respuesta que ‘para el mal de altura, el único remedio es bajar‘. O como otra niña, que quiso saber si los caballos sentían frío. Y no faltó el que quiso averiguar qué comían cuando estaban en la montaña, a lo que el gendarme realizó un pormenorizado detalle sobre los guisos y carbonadas que ya son un clásico entre los expedicionarios del Cruce.