Hasta no hace mucho, cualquiera que pasara por la Avenida Libertador, a metros de Urquiza, podía distinguir desde la calle una colorida calesita, siempre llena de niños. Y sí, no podía ser de otra manera, tratándose de un jardín de infantes. La escena casi que era predecible en ese lugar, desde hace 28 años. Es que allí funcionaba el famoso "Lagarto Juancho”, hoy Colegio de Nivel Inicial Integral Independencia.

Eso fue hasta el inicio de este ciclo lectivo. Ya que las clases del 2016 encontraron al "Lagarto” en otro domicilio, más precisamente a la vuelta del colegio madre que lleva el mismo nombre. Ahora se ubica en una casa enorme (sobre calle Santo Domingo, en Rivadavia), donde hay un monumental patio de juegos (incluso con la misma calesita y el mismo tobogán treintañero que atesora el establecimiento desde sus inicios), está prevista la demarcación de canchas de fútbol y hockey sobre césped y, como si fuera poco, hay una sala de 2 años, otra para 3, dos más para 4 y una última, para 5 más los típicos rincones, baños adaptados a los chiquitos y espacio para los talleres que los niños pueden tomar a contraturno.

Esta no es la primera ubicación que tuvo este jardín pionero en educación para chicos desde 2 años y luego al pasar a ser colegio primario y más tarde secundario, incorporó la doble escolaridad. Cuando se inauguró en 1977 tuvo su primer casa en Libertador y Del Bono, a los dos años, se mudó a la Avenida Circunvalación, 7 años más tarde, frente a la Casa de Gobierno. De ahí pasaron a la Avenida Libertador y Urquiza. En ese espacio, en 1988 crearon la primer sala de 5 años y con ella, al año siguiente, se fundó el Colegio Integral. A los años cambió de domicilio la escuela, pero no el jardín. Hasta ahora.

El 18 de marzo pasado hicieron la bendición del "nuevo jardín” con los rezos del presbítero Mario Robles y la compañía de autoridades del municipio de Rivadavia y del Ministerio de Educación, más un grupo de mamás "fundadoras” de la institución, docentes jubiladas, exalumnos con sus hijos y los alumnos de 6¦ año que se ocuparon de preparar y servir el catering del festejo. El acto sirvió para arriar por primera vez la bandera donada por la "madrina” del Lagarto, Perla Miodowsky.