La firma de concesión de la explotación turística de la villa fue fijada para la semana pasada, pero los representantes de La Vicuñita no se presentaron y ayer aclararon esa situación. “Intentamos hacer algunas modificaciones en el contrato, pero luego se nos aclaró que cuando se aprobó el llamado a licitación la legislatura había aprobado el contrato modelo y no se podía modificar. No fue otro inconveniente. El proceso fue transparente, teníamos hechos los seguros y era sólo un problema de interpretación que ya está solucionado”, dijo Ricchiardi.

Por su parte el secretario de Turismo señaló que no había nada discutible en el contrato ya que tal como se aprobó en Diputados debía firmarse.