El coche avanzó unos 15 metros y tras unos segundos que parecieron una eternidad para los que se creían testigos de un hecho sobrenatural, se quedó estacionado nada menos que en medio de la Avenida España. El estupor se quebró con los primeros bocinazos, de los conductores que venían de Norte a Sur por España y que debieron maniobrar para esquivarlo. Luego llegó la Policía, que controló el tránsito tras constatar que el VW Gol estaba vacío y con las puertas trabadas. Durante tres horas, el auto fantasma estuvo parado en esa esquina y causó un verdadero caos de tránsito. Y todo porque su dueño no lo estacionó al menos con freno de mano, luego de dejarlo al costado de la vereda Sureste de la Avenida Córdoba, que está en declive.
Hubo congestión vehicular en una esquina por demás complicada y en ese lapso, la Policía se cansó de esperar al dueño del vehículo. Pero como no apareció, llamaron a una grúa. El Gol quedó radiado en la guardia judicial de la Policía de Tránsito y al propietario, oriundo del departamento San Martín y cuya identidad no trascendió, le aplicaron una multa por obstrucción al tránsito, que es de unos 600 pesos, según informaron fuentes judiciales.
"El auto se empezó a venir despacito. Yo pensé que al conductor no le entraba algún cambio o algo, porque no aceleraba. Pero después vi que no había nadie manejando. El Gol se paró en el medio de la calle y en ese momento no hubo un accidente de pura casualidad", relató Pablo Zeballos (17), un canillita que trabaja sobre el boulevard de Avenida España y Córdoba.
El hecho sucedió sobre las 7:50 y la grúa retiró la unidad recién a las 11:15. Los policías que actuaron en la insólita situación investigaron si el auto tenía antecedentes, pero como no registraba anormalidades, solicitaron informes de dominio para ubicar al dueño. Sin embargo, no fue posible contactarlo. Fue sobre el mediodía que el hombre (sin tener idea de lo que había pasado) fue a buscar su vehículo y se asustó porque pensó que se lo habían robado, según fuentes policiales. Tras un llamado al 911, se enteró de que estaba radiado. Ahora, el conductor deberá presentarse ante el Tercer Juzgado de Faltas y pagar la multa, si el juez lo cree necesario, para luego retirar su coche.
Según Zeballos, no es la primera vez que sucede algo similar en la esquina de Córdoba y España. En enero pasado, también un VW Gol estacionado del lado Noreste de la Córdoba se vino en reversa y alcanzó tal velocidad, que el canillita y un amigo debieron frenar la alocada marcha cuando las dos ruedas traseras se montaron sobre el boulevard. Ese auto pertenecía a un empleado de una empresa de distribución de lácteos de la cuadra, por lo que le avisaron y lo sacó inmediatamente.

