La jornada electoral arrancó con calma y sólo hubo un contratiempo que generó algunos inconvenientes y algunas demoras. Fue el cambio en los padrones que hizo que varias personas tuvieran que votar en otras escuelas y no donde lo hicieron hasta la elección anterior. El problema radicó en que muchos electores no se enteraron del cambio. Para estos comicios, el 30% del electorado tuvo un nuevo destino de votación, medida que se tomó en el contexto de pandemia y para descongestionar y evitar aglomeraciones de gente, por protocolo covid.

En la esquina Este del edificio de la Escuela Granaderos de San Martín, en 9 de Julio, hubo una larga fila de personas a primera hora de la mañana. Sobre la vereda se instaló un grupo de voluntarios para guiar a los "desorientados". "Todo el que viene a votar a esta escuela, primero pasa por nuestro puesto para corroborar dónde vota. La gente está muy confundida, así que agradece nuestra ayuda", dijo una de las voluntarias.

La misma imagen se repitió en la Escuela Pellegrini, en Santa Lucía, donde la gente se agolpó en los ingresos para consultar los padrones, en algunos casos contando con la asistencia de la Policía para agilizar el trámite.

En tanto que en la Escuela 14 de Febrero (Rawson) hubo voluntarios que usaron sus propios celulares para averiguar dónde votaban algunos electores. Muchos de ellos tuvieron que trasladarse a otra escuela y eso generó inconvenientes y demoras.

• POSTALES

Inicio con demora

En la vereda de la Escuela Granaderos de San Martín, en 9 de Julio, abrieron los comicios con 36 minutos de retraso. Las autoridades electorales dijeron que eso se debió a que las urnas llegaron tarde. Esto generó que la gente tuviera que esperar media hora para poder ingresar a votar.

Una postal distinta

A diferencia de otras elecciones, ayer no hubo vendedores ambulantes en las cercanías de las escuelas donde se votó. Esta ausencia fue tema de conversación entre los votantes que se quejaron por no tener cerca ni a un vendedor de semitas caseras como en otras ocasiones.

Sin cuidadores

Ayer tampoco hubo cuidacoches cerca de las escuelas donde se votó. Esto fue un contratiempo para quienes se trasladaron en bicicleta y sin llevar candado para dejarlas aseguradas en algún lugar. Hicieron fila con el vehículo al lado e ingresaron con él al edificio escolar, con permiso policial.

Congestionamiento

Muchos decidieron ir a votar a primera hora y no dejarlo para más tarde como suele ocurrir. El fundamento: como desconocían cuánto tiempo se iba a demorar la votación por el protocolo, prefirieron madrugar. Esto hizo que se formaran filas de hasta dos cuadras en algunas escuelas.

Jornada silenciosa

La jornada electoral de ayer se desarrolló bajo un clima muy diferente a las de ediciones anteriores. Y la principal diferencia radicó en el silencio que reinó tanto afuera como adentro de las escuelas. Mucha gente se mantuvo tranquila y hasta sin hablar a la espera de votar.