San Juan, 28 de abril.- El uso de las redes sociales siempre generó debate, sobre todo por el vacío legal que lo rodea. El caso de la mujer sanjuanina que fue demorada por orden de un juez después de acusar injustamente a un albañil de secuestrar niños renovó la discusión en todo el país.

Los principales portales digitales de noticias, como Infobae, Clarín y La Nación, se hicieron eco de lo sucedido y consultaron a especialistas para saber si el caso sanjuanino es aplicable a otras situaciones.

"Internet es un medio de difusión. Cualquier persona que dañe la imagen de otra tiene que responder. Es probable que la proliferación de estas denuncias llegue por la inacción de las autoridades ante esos delitos. Los usuarios de las redes deben ser conscientes de que no pueden dañar el honor de una persona con una denuncia falsa. Porque en Internet nada es gratuito ni anónimo", aseguró a La Nación, Horacio Granero, presidente de la editorial de jurisprudencia El Dial, que intervino en la redacción del proyecto de reforma del Código Penal sobre delitos informáticos.

El caso

El caso que generó una enorme paranoia en la gente ocurrió el último miércoles y tuvo como protagonista al albañil desocupado Orlando Heredia (45, padre de 5 hijos). El lunes pasado, el hombre esperaba que su familia regresara de hacer unos trámites y estaba parado junto a la camioneta de su hermano en la puerta de la escuela Santa Rosa de Lima, situada en calle San Luis, al Oeste de Tucumán, Capital, cuando fue fotografiado.

La imagen llegó a manos de Alejandra Femía (39, madre de 3 hijos) quien decidió subirlo a Facebook. Rápidamente la imagen se virilizó acusándolo de secuestrador de niños. La mujer fue demorada por cometer una infracción prevista en el artículo 113 del Código de Faltas, que castiga al que "en lugar público o abierto al público o por medio de teléfonos o redes informáticas u otros medios, profiera insultos o cause molestias o perturbación de cualquier naturaleza a terceras personas".