Lucas Navarro (de verde), junto a sus amigos solidarios.

Lucas Navarro es masajista del plantel profesional de San Martín, Silvio Atampiz realiza el mantenimiento de las máquinas de un casino, Martín Espinoza trabaja en una estación de servicio y Darío Balmaceda juega al fútbol y también tiene un almacén. Ninguno de los cuatro es chef ni se lleva bien con la cocina, pero igual decidieron emprender una aventura solidaria para darles de comer a las personas más necesitadas de Marquesado, el lugar se forjó su amistad.

El grupo se conoce de toda la vida y, junto a Osvaldo Icazati, se dieron cuenta de que no podían quedarse de brazos cruzados cuando el presidente Alberto Fernández anunció la cuarentena obligatoria por el coronavirus. Si bien todos se desempeñan en diferentes rubros, ninguno trabaja la cantidad de horas habituales y por eso tienen tiempo para hacer la logística solidaria.

Empezaron poniendo $1.000 cada uno de ellos y luego siguieron con pedidos a negocios amigos hasta que la gente se fue prendiendo y comenzó a donar. “Así como a nosotros no preocupa la situación actual, nos dimos cuenta de que hay mucha gente solidaria que gracias a Dios nos ayudó”, comentó Lucas.

La primera comida fue el viernes 24 de abril en el Lote Hogar Nº 53 de Marquesado, Rivadavia. Allí, encontraron a Don Luis Paredes y a su esposa Patricia Ocampo, quienes también dieron una mano y oficiaron de cocineros. Hicieron un exquisito guiso de arroz para unas 240 personas, entre grandes y niños, que afortunadamente se olvidaron por algunos minutos de la cruel realidad por la que atraviesan.

“Hay gente muy necesitada con este parate por la pandemia y otra que no tanto, pero prácticamente en la misma situación. Nosotros tratamos de ayudar a todos y por eso vamos de un lugar a otro”, dijo el masajista verdinegro.

Con la experiencia del debut, el segundo capítulo fue nuevamente en el Lote Hogar, el pasado lunes 27. Cambiaron el menú y, nuevamente con la ayuda de la familia Paredes-Ocampo, hicieron una carbonada para más de 80 familias. Dos días después, el grupo de amigos trasladó su solidaridad hasta el Asentamiento Estación Marquesado para cocinar un tremendo arroz con pollo.

Este viernes 1º de mayo será el turno de La Bebida, una localidad vecina de Marquesado. Primero colaborarán con otras personas en una interesante movida solidaria en el Lote Hogar Nº3 y, por la tarde, harán arroz con leche con facturas que fueron donadas por cuatro panaderías.

“Es una aventura que jamás nos imaginamos que iba a crecer de esta manera. Nuestro objetivo es hacerlo por dos meses más o hasta que haga falta, siempre y cuando no hayamos vuelto a nuestros trabajaos”, cerró Lucas.