Los tarros de helado, los potes de dulce, los frascos de café, las cucharas para la ensalada. Todo accesorio es bueno a la hora de ser utilizado como un instrumento de percusión y esto es lo que hicieron unos 50 niños que asisten a los talleres artísticos que se dictan en la ex Estación San Martín, y que forman parte de las actividades de verano de la Municipalidad de la Capital. El taller musical es el que más entusiasma a los chicos: lo que más les gusta es ingeniárselas para improvisar instrumentos con los objetos que tienen al alcance de la mano y aprender distintos ritmos. Lo hacen los jueves y durará todo el verano.