Pedro Pablo Reggio lo recibió hace 35 días de un joven llamado Marcelo para que se cure su hijo, José Pablo Reggio, que estaba grave por un accidente de tránsito. José Pablo ayer salió de alta y por eso su padre tuvo que entregar el rosario a otra familia que tiene a un ser querido grave, tal como lo manda la regla del rosario que nunca ha fallado.

A la madre de Marcelo, en 2002, se lo dio un anciano que también tuvo un milagro: una persona cercana sobrevivió a un accidente automovilístico. Pero la mujer no conoce la historia hacia atrás.

Lo cierto es que ayer Dante Aciar recibió el crucifijo para que su hijo, Jorge, que está en Terapia Intensiva desde hace un mes, se recupere. Lo obtuvo de manos de José Pablo, quien le decía: "Cuando tu hijo esté bien, lo tenés que entregar a alguien más que lo necesite".