El amplio camarín del Teatro Sarmiento se vistió de gala anoche. Los arreglos florales y las luces con tonalidades azules le dieron un brillo especial a las candidatas a Reina del Sol, mientras se iban transformando para protagonizar la Noche Soberana. Las chicas posaron para las cámaras como verdaderas artistas y se compenetraron con su papel antes de subir al escenario.

Un grupo numeroso de estilistas y maquilladores preparaba a las chicas que esperaban ansiosas sentadas en fila frente al espejo. Cuando aún faltaba una hora para la presentación, ya estaban casi listas, sólo faltaban algunos toques de spray para terminar de acomodar las pelucas blancas.

Después de tanto tiempo de ensayo, las candidatas conocían al pie de la letra los movimientos que debían hacer durante la presentación. Por eso, en lugar de nervios tenían caras sonrientes y gestos de entusiasmo. En ese ambiente relajado posaban y hasta se animaron a agruparse y levantar las piernas o las manos para improvisar una coreografía estática frente a las cámaras.

Entre ellas estuvo la actual Reina del Sol, Macarena Guerrero, quien les dio palabras de apoyo. Y recibieron la visita de algunas autoridades que entraron al camarín para saludarlas. En ese momento, los vasos de agua iban a venían en las manos de las candidatas, que hasta se dieron tiempo para acomodar el pelo de algunas de sus compañeras. Así, el despliegue que se vio detrás del escenario fue tan profesional y organizado como el espectáculo que se presentó para los espectadores y miembros del jurado, quienes colmaron el teatro.