El procedimiento de la mediación comienza cuando, por pedido de las partes que no pueden resolver el problema o por decisión de un juez, la causa se remite al Centro Judicial de Mediación para que tome intervención. El magistrado dispone que se suspenda el proceso. Cuando la causa llega al organismo, en la mesa de entradas se realiza el sorteo a través de un programa informático, para decidir quién será el mediador que intervendrá. En San Juan son 62 los profesionales habilitados y la matrícula la controla el Foro de Abogados de la provincia. Recién entonces, el mediador convoca a las partes a una primera audiencia. Puede haber más de un encuentro para que haya acuerdo o no. Si no lo hay, se le notifica al juez, que dispone la continuidad del juicio. En el caso de que haya acuerdo, las partes firman un acta y el mediador la remite al juez para que la homologue. Los honorarios del mediador se fijan en la audiencia o los determina el juez. ‘Con la mediación se logra bajar los niveles de violencia, tan caros a nuestro estilo de vida. Intentamos servir de puente de comunicación para que las personas o los entes, por sí mismos, puedan desentrañar si realmente se trata de un problema o un conflicto o es que nos nos hemos podido entender‘, dijo Quintar de Massara.
