El Fiscal General de la Corte de Justicia, Eduardo Quattropani, volvió a la carga ayer contra la juez Camus por el polémico tema del tratamiento que deben recibir los condenados antes de salir a la calle. Y lo hizo con el caso puntual de un sujeto de apellido Riveros, detenido cuando gozaba de un régimen de semilibertad y salidas transitorias, sospechado de violar a su hijastra de 15 años el pasado mes de enero.

Desde la Fiscalía de Ejecución se habían opuesto a la salida de Riveros, pero la juez igual le concedió la salida. Y, según Quattropani, la juez dio el beneficio sin considerar necesario incorporar un informe psicológico y psiquiátrico, porque “el penado no padece patologías mentales que justifiquen el tratamiento psiquiátrico (…), por lo tanto la exigencia de ese tratamiento, a todas luces, es un exceso de rigorismo formal”.

Quattropani divulgó ayer los resultados de las pericias psicológicas a ese preso condenado a 7 años y 6 meses de cárcel por robo agravado, con resultados muy distintos. Esos estudios revelaron que Riveros registra un “trastorno de personalidad, con rasgos antisociales, psicopatía, mentira crónica, que muestra desprecio e insensibilidad por los demás, carece de arrepentimiento o conciencia moral y no le interesa más que la satisfacción inmediata de sus deseos. Se corresponde con el psicópata desalmado de Kurt Scheneider, que los describe carentes de compasión, vergüenza y arrepentimiento…”.

“La señora juez (Camus) podrá mostrar los más diferentes gráficos, pero no la he escuchado desmentir, caso a caso lo informado por fiscalía (dijo en alusión a la diferencias en las estadísticas por el quebrantamiento de salidas). No la he sentido dar una explicación a las víctimas ni a los familiares de éstas que han padecido el accionar de los que ella consideró aptos para estar en la calle. Todo se puede evitar, menos las consecuencias. Nadie la critica por entender el derecho como lo entiende, sólo hace falta que se haga cargo y se sienta orgullosa de los resultados y que así se lo diga a la sociedad, a las víctimas”, disparó ayer el fiscal.