Que la Corte de Justicia de Copiapó, en Chile, haya analizado el planteo realizado por la comunidad diaguita (el que pedía el cierre por tiempo indefinido del proyecto), y posteriormente decidir rechazarlo por entender que no hubo contaminación en el agua, fue un fuerte espaldarazo para la continuidad del proyecto binacional. 
Si bien el reciente fallo confirmó la suspensión de los trabajos hasta tanto se realicen las obras de mitigación, no fue una nueva traba y, así las cosas, ahora será tarea de Barrick hacer en tiempo y forma las obras que permitan darle luz verde definitiva al proyecto