Maratónica. En la agencia de quiniela Adárvez, el tabaco y los pocos cigarros disponibles se agotaron en menos de dos horas. Su propietario contó que la postal se repite día a día por la altísima demanda de los sanjuaninos y porque la distribución todavía no se normaliza.

A poco más de diez días de que las tabacaleras volvieran a trabajar en el país, en San Juan la postal de largas filas por conseguir cigarros o tabaco continúan repitiéndose. Es que si bien las dos distribuidoras que hacen el reparto de tabaco y cigarrillos en San Juan ya trabajan con normalidad, no logran abastecer a los comercios sanjuaninos y es por eso que estiman que recién esta semana que comienza hoy llegarán a normalizar el stock en los 19 departamentos sanjuaninos.

Son 200 los pedidos que salen a diario desde la distribuidora de Rafael Moreno y casi la misma cantidad de Delivery. La distribuidora de Rafael Moreno abrió sus puertas en el centro el día martes pero fue tanto el desorden del público que no respetó la distancia en fila, que los propietarios decidieron cerrar el local comercial y realizar sólo reparto puerta a puerta con los negocios adheridos. Con la condición de que no suban sus precios, como venía pasando semanas anteriores donde por un paquete de 20 llegaron a cobrar hasta 700 pesos y por un cigarro suelto 40 pesos, los comerciantes igual se las ingeniaron para poder sacar rédito de ser los privilegiados en tener cigarros para la venta.

Gasto doble. Decenas de personas formaban una larga fila en una estación de servicio de la Esquina Colorada. Los obligaban a comprar mercadería.

Algunas de las estaciones de servicio, que fueron las primeras en tener stock, mantuvieron sus precios pero con la condición de que los compradores gastaran el mismo monto de los cigarros en mercadería. En una estación de servicio de la Esquina Colorada, en Rivadavia, si una persona quería llevar tres paquetes de 20 que se vendían a 150 pesos, debía comprar 450 pesos en gaseosas, snacks, chocolates o lo que hubiese disponible. La medida generaba molestar en el centenar de fumadores que esperaban en una larga fila: "Tuve que llevar un paquete y comprar una gaseosa que te sale 180 pesos, encima tuve que pagar una diferencia por algo que no estaba en mis planes", contó Jorge, uno de los compradores. Esa estación era de las pocas que seguía contando con cigarrillos para la venta.

Esa medida se repitió en varios negocios, como en un almacén del Barrio Illia, donde se vendía un solo paquete de cigarrillos por persona y la condición era gastar al menos 200 pesos en mercadería. A su vez, en algunos kioscos dijeron que esa maniobra también se hace en las distribuidoras.

Marlboro, Philip Morris y Chesterfield son por ahora las marcas que están llegando a San Juan. En tanto que en una agencia de quiniela ubicada en Entre Ríos y Rivadavia, se agotaron los 150 paquetes disponibles en menos de dos horas.

Postal repetida. En Cikar Tobacco, en pleno microcentro, las largas filas ya se hicieron una costumbre en las últimas semanas. Allí los precios no variaron.

Por eso todavía conseguir tabaco también sigue siendo toda una odisea. El local de Cikar Tobacco, en pleno centro sanjuanino, agotó su stock. La imagen de la fila que da vuelta a toda la cuadra se repitió hasta que cerca del mediodía un empleado debió salir a informar que sólo quedaban 40 paquetes de tabaco para la venta, lo que generó un gran malestar en los compradores que restaban. Según contaron personas que llevaban más de una hora haciendo cola, ese lugar es el único donde se mantiene estables los precios.

Mientras los fumadores continuarán haciendo carreras para conseguir su paquete de cigarrillos, desde las dos distribuidoras confían en que recién esta semana, entre miércoles o jueves (teniendo en cuenta que el lunes es feriado nacional), se logre normalizar el stock en los negocios de toda la provincia.