A finales de los 80, Juan Carlos Calabró construyó dos personajes-fenómeno: Johnny Tolengo, el majestuoso y Aníbal, un pelotazo en contra. Con sus gafas coloridas y ropa estridente, Tolengo -langa porteño y gran aporte al bizarrismo- formó parte de Calabromas. Su combo artístico incluyó el memorable pasito (el salto de atrás hacia adelante y el baile), canciones pegadizas (“que alegría, que alegría, olé, olé, olá”), varias películas taquilleras y presentaciones teatrales “sold out” (supo llenar varias veces el Opera y con más de 35 mil personas). Aníbal “El pelotazo en contra”, brilló en el cine junto a Minguito Tinguitella (Juan Carlos Altavista) y su menester interpretativo acudía a simpáticas contradicciones. Ese mismo bastión (pero reciclado), se trasladó en los 90 al viejo canal 9 con “El Contra´, un ciclo co-protagonizado con Antonio Carrizo y fue parte de los éxitos de la era Romay. Allí, Calabró hacía enojar a las estrellas invitadas, justamente, contradiciéndolas.
