‘Si tuviera que definir una especialidad sería sin dudas la carne, ya sea de caza, vacuna o porcina. Pero soy una persona muy inquieta, por lo cual me gusta mucho el tema de la cocina molecular. Parte del tiempo de trabajo se dedica a innovación de nuevos platos, conjugando diferentes tipos de técnicas, alterando texturas pero sin perder el sabor original de los alimentos‘.