Luego de la liberación de los caldos nuevos y cuando todos esperaban un aumento en el precio de traslado de los vinos básicos, los valores se han mantenido; fundamentalmente porque hay un stock suficientemente grande como para que aquello ocurra. Se han realizado operaciones de blanco escurrido entre $1 y un $1,10 por litro y de tintos básicos a $2,20-. Pero tampoco se advierten razones para que bajen violentamente. El mercado de precios se normaliza lentamente y el dato distintivo es que la gran diferencia de precios que existía hasta el año pasado entre el vino y la cerveza, se va achicando. Mientras las cervezas aumentaron un 34% entre el 2010 y 2011, el vino lo hizo en un 30,5%.
