Hugo Ramírez fue convocado por la conducción nacional apenas presentó la renuncia y la idea era hacer la reunión los primeros días de enero. Pero como la mayoría de los dirigentes nacionales decidió tomarse unos días de descanso en la primera quincena, para volver y meterse de lleno con la campaña electoral que quiere llevar a Mauricio Macri a la Casa Rosada, se postergó para los últimos días de este mes. El encuentro podría llevarse a cabo en la última semana, cuando está previsto que Humberto Schiavone retome sus actividades, y no se descarta que después pueda haber uno con Eduardo Cáceres, la otra pata de la pelea.
No es la primera vez que el presidente del partido a nivel nacional debe atender un conflicto en San Juan. En 2012 vino varias veces para intentar calmar los ánimos luego de la destitución de Ramírez como máxima autoridad, pero no fue suficiente y la interna se agudizó. A los meses, en medio de la polémica y con el aval de Macri, dictó la resolución que puso como interventor del partido al bonaerense Eugenio Burzaco.
