El reclamo de productores agrícolas y ganaderos de Valle Fértil para que se declare como plaga al jabalí, y así reducir su presencia, se transformó en un proyecto de comunicación que se presentó en la última sesión de la Cámara de Diputados y que tendrá una respuesta en la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.

Se estima que, por los plazos administrativos, en dos meses habrá una resolución de ese área del Poder Ejecutivo. Y en caso que se declare al jabalí como plaga, también el método para que disminuya su presencia. A priori, hay varios indicios para esperar que se considere al jabalí como una amenaza real, aunque la forma de achicar el número de estos animales abrirá otro foro interno. El diputado Silvio Atencio, autor del proyecto de comunicación, opinó que habilitar la cacería una opción que también significaría un nuevo ingreso económico a las arcas públicas. Si eso ocurriese, habrá que crear una nueva estructura, ya que actualmente en la provincia está prohibida la cacería a cualquier especie.

La Dirección de Conservación y Áreas Protegidas de la Provincia será el organismo que evaluará si el jabalí es una plaga. Su titular, Dardo Recabarren, indicó que equipos técnicos estudiarán el caso. Entre los datos previos que motivan a iniciar la investigación es que el jabalí ya está declarado como una plaga a nivel nacional y cada jurisdicción debe analizar su situación. Además es una especie exótica (es decir que no forma parte de la fauna de la zona, como por ejemplo sí lo es el puma) y los productores agroganaderos la acusan de ser muy dañina. Se reproduce rápidamente y no tiene un depredador natural. Y ocupa lugar de una especie autóctona, como es el pecarí del collar.

Recabarren señaló que esos datos tendrán su peso específico en la evaluación. Si se declara la nueva plaga, el funcionario se mostró más cauto en el método para combatirla y describió tres posibles fórmulas: que sean equipos propios de la Secretaría los encargados de reducir la cantidad de estos animales, otorgar una licencia exclusivamente a los productores o permitir la caza.