Las alrededor de 40 familias que viven en el asentamiento Pedro Echagüe, de Santa Lucía, no tienen paz. Aseguran que todos los días encuentran por lo menos un alacrán tanto adentro como afuera de sus viviendas. Por eso, denunciaron la situación en el municipio.

“Yo tengo mellizos de 7 años y una beba de 7 meses y tengo miedo por ellos por eso pido ayuda”, comentó Germán Molina, quien guardó varios alacranes de distintos tamaños en frascos que los llevó al municipio el viernes pasado para pedir una desinfección.

A la vez, agregó “todas las noches, antes de acostarnos, sacudimos las camas. En la mañana, antes de vestirnos, sacudimos la ropa y el calzado, ya no podemos vivir así. En la Municipalidad me dijeron que irán cuanto antes”.

Y sostuvo: “Yo sólo pido ayuda porque temo por hijos”.