San Juan, 13 de mayo.- Unas 180 familias serían las damnificadas en una presunta defraudación con lotes que han comprado para viviendas del IPV, dentro del Plan Federal II y cortaron esta mañana Mendoza y Remedios de Escalada, frente a la Fundación Padre Báez Laspiur, entidad sindicada como la estafadora por los manifestantes.

Una de las afectadas declaró a la prensa que “hace diez años que 180 familias pagamos los lotes, y aún nos tiene en vueltas”. “Primero nos dijeron que teníamos que esperar la plata del Plan Federal II. Más tarde nos informaron que ya no dependíamos de ese plan y que las casas se harían con plata enviada de la Nación, por el ANSES”, dijo la vecina.

Desde la Fundación Padre Báez Laspiur, entidad que vendió y cobró los lotes, se limitaron a aclarar que “la construcción del barrio marcha como se debe”. La fuente consultada confirmó que “todos los trámites administrativos están correctamente presentados ante el IPV, y a la espera de que los mecanismos del Plan Federal II disponga las herramientas para comenzar las obras”.

Los denunciantes se quejaron de la falta de atención por parte de funcionarios de la entidad acusada. Desde la Fundación aclararon que “la directora, Elba Moreno, está con un posoperatorio, por lo que no está en funciones, y el resto del personal administrativo realiza durante tres días un curso de cristiandad, por lo que tiene permiso de no asistir a los lugares de trabajo”. De todas formas, agregaron que “hay personal que cubre el hueco administrativo en horas de la tarde”.

“Con estos antecedentes de las casas del IPV, de la otra estafa, tenemos mucho miedo”, declaró una manifestante. “Dijeron (desde la Fundación) que si devolvemos el terreno nos devolverán el dinero que pagamos, pero no actualizado. O sea que cobraremos los 8000 o 9000 pesos que pagamos hace 10 años”, se lamentó.

“En diciembre nos dijeron que destapemos champagne, que en febrero comenzaba la construcción”, declaro una afectada, “y en marzo que la construcción seguía parada, que tengamos paciencia”. La vecina declaró que fueron “citados por personal de la entidad vendedora a una reunión en el Centro Cívico, con gente del IPV, y al llegar no había nadie, ni había tal reunión”.

Según la vecina que ofició de vocera de la protesta ante la prensa, se comunicaron con el IPV, donde les dijeron que se “comuniquen con la entidad que les vendió los lotes ante cualquier inconveniente, porque ellos hacían lo mismo, arreglar todo con la fundación”, concluyó.