San Juan.- Su sonrisa y remera floreada no parecieran emparentarse con su personalidad. ‘Soy tímido’, dijo Jorgito, que compró una de las entradas preferenciales.
Haciendo la cola desde muy temprano y con cartel en mano está Sonia Rivas, que a sus 32 años disfruta de la misma música que a los 9 años, cuando vio a Ricky Martin en su único antecedente en San Juan. Ahora, con su hija, disfrutarán del show.
Abuela hija y nieto. Este trío de Chimbas se hizo notar en la fila. La abuela, en silla de ruedas, ‘ni loca’ se lo perdía. Lautaro se animó a entonar ‘La Mordidita’