Sólo bastará con llegar a calle Sarmiento, al predio que está a pocos metros de calle La Laja, en Albardón, para disfrutar durante tres días del paso elegante y firme de los caballos peruanos de paso. Es que allí se llevará a cabo el XXIV Concurso Regional de Caballos Peruanos de paso. La cita comenzará el próximo 16 de marzo y concluirá el 18. Este año esperan la participación masiva de criadores de otras provincias que desembarcarán con sus animales. Según Walter Lima, de la comisión organizadora, esperan más de 80 ejemplares foráneos, mientras que de San Juan estarán participando cerca de 40. El concurso se hará el viernes, sábado y domingo próximos, de 9 a 19, en el predio de Cabaña Doña Antonia, en La Cañada, Albardón. La entrada será libre y gratuita.
A esto se sumará que llegará la máxima autoridad peruana de la Asociación Nacional de Perú, y varios representantes de la Asociación Nacional de Criadores de Caballos Peruanos. Una vez más las infaltables serán la mujeres que integran el grupo Estirpe Salteña, conformado por esposas e hijas de los criadores, que brindarán un espectáculo sobre sus caballos, al finalizar el concurso. Esta es la cuarta vez que visitan la provincia, y durante tres años consecutivos fueron furor en el Festival de Jesús María.
Según Lima, el concurso crece año a año y San Juan se está reafirmando como uno de los sitios destacados por la calidad de los animales que se crían. Además son cada vez más los criadores que optan por participar. En 2009 hubo 30 caballos foráneos, en 2010 fueron 66 y el año pasado fueron 80, una cifra similar a la de esta edición. Las categorías que concursan se dividen en Hembras, Machos y Castrados. A su vez, cada categoría se divide en dos estilos: cabresta y de silla, y cada estilo se subdivide según la edad del animal. Si bien el concurso regional empieza el viernes, recién el sábado se harán las primeras competencias. Es que el primer día se destina al ingreso de animales y a la verificación de salud y vacunas.
Según explicó Lima, este es un caballo que se utiliza para pasear. Es que se caracteriza por tener un paso armónico y elegante. Por eso fue elegido por la aristocracia. Esta raza, como tantas otras, fue traída por los conquistadores en la época de la colonización, luego fue evolucionando en América y es una de las razas que más enorgullece a criadores en Argentina. El estirpe de esta raza tiene mucho que ver con sus delicados movimientos, avanzando siempre con una pata y permaneciendo con tres de apoyo. Su andar lo realiza en cuatro tiempos lo cual, a pesar de aparentar rápido y complicado, ayuda a mantener su equilibrio y a atenuar la velocidad de sus movimientos.

