A pesar de ser conmemorativas, las nuevas monedas de 2 pesos llegaron para quedarse definitivamente. La determinación se tomó tras comprender que es un monto casi "fundamental" para el funcionamiento del consumo argentino, siempre ávido de "cambio chico". "La medida es de orden práctico y apunta a dar una mayor vida útil que el billete, reforzando el dinero chico para transacciones pequeñas", explicaron desde el Central.