Lejos, muy lejos de la instalación de un shopping, un hipermercado o un centro comercial, hasta ese día los sanjuaninos no tenía ningún paseo de características similares. Por eso, la inauguración de la Galería Estornell fue un hecho histórico en la provincia. Y así se vivió. Domingo a la mañana, una multitud se acercó hasta Plaza 25 de Mayo para presenciar la apertura del edificio que contaba con 33 locales, entre los que se destacaban ‘Pituca’ y Calzados Emilio, justo en la fachada de calle Mitre entre Mendoza y General Acha. Nadie quiso perderse semejante fiesta. Lolita Torres, estrella del momento, fue invitada de lujo.
"Galería Estornell será el centro más moderno y completo para todas las compras que usted necesite efectuar para su hogar y para su familia. Además, tendrá los mejores precios, porque los mismos dueños estarán al frente de cada negocio consultando sus deseos y atendiéndolo cada vez mejor". Así promocionaban días antes la inauguración del primer paseo techado de San Juan.
El gobernador Américo García, monseñor Audino Rodríguez y Olmos y autoridades nacionales estuvieron presente en el evento de características únicas para la época. Hubo ofrendas florales en la estatua de Sarmiento, bendición del edificio, corte de cinta e incluso un brindis con champagne. Y no era para menos. Desde ese día, los sanjuaninos podían por primera vez comprar ropa, zapatos, alimentos o cortarse el pelo, sin trasladarse demasiado, en un sólo paseo comercial.
"Al construir esta galería, en ningún momento pensamos en nosotros. Sólo pensamos en nuestra ciudad. Aquí trabajamos todos, aquí trabajaron cientos de obreros de nuestra provincia. San Juan seguirá creciendo, es su destino. Crecer y crecer. Otras galerías seguirán levantando sus torres de cemento, como agujas desafiando al espacio. Esta que inauguramos hoy quedará pequeña, pero tendrá en la historia edilicia de la ciudad un título y una página que nos llenará de gloria", dijo Jorge Estornell, hacedor de la construcción.
Por su parte, el gobernador García remarcó el esfuerzo de Estornell "ya que en el momento económico más difícil, cuando la tarea de la reconstrucción se hallaba prácticamente paralizada y los obreros con las manos sin ocupación, en ese momento asumió la tarea de levantar y terminar este magnífico edificio, signo de la capacidad realizadora de los sanjuaninos".
Las páginas de los diarios se colmaron de publicidades y anuncios de cada uno de los comercios. La novedad tenía a la población encantada.
Días antes de la apertura formal del edificio, Medias ‘Pituca’ se anticipó a los festejos y abrió su local ante ciento de personas, mayoritariamente mujeres, que se acercaron para ser los primeros en comprar. De hecho, se formaron largas colas de gente que esperó por horas para ser los primeros en comprar.
Quién fue Jorge Estornell
De una familia de emprendedores, Jorge Estornell estudiaba en u colegio de Capital Federal cuando sorpresivamente falleció su padre Bautista Estornell, comerciante e industrial, que a la postre le daría nombre a la galería. Con sólo 18 años de edad, de inmediato regresó a San Juan y se hizo cargo de los negocios de la familia. Supo ponerse al hombro cada emprendimiento: aumentó la capacidad de producción de su bodega, edificó el cine San Martín, el Hotel Nogaró y el Banco Popular, entre otras tantas cosas.
Siendo aún muy joven, comenzó a darle forma al gran sueño de su padre: construír una galería que uniera las calles Mitre y Mendoza, a través de la manzana en la que ya se encontraba el imponente cine Estornell, uno de los mejores del interior del país. Para ello se utilizaron unos 60 millones de pesos.
Jorge, se casó con Ana Gualino, con quien tuvo tres hijos. Su vida terminó de manera trágica el 1 de mayo de 1990, cuando el helicóptero en el que viajaba se precipitó sobre la tierra. Con su muerte, San Juan perdía a uno de los empresarios más importantes de la historia local.
