El gobernador Gioja se divirtió en la visita que hizo anoche al estadio de Pocito y apenas llegó le preguntó al intendente Sergio Uñac si había llevado una pelota para usarla en la cancha del estadio. El intendente a las risas contestó que se había olvidado. Luego de eso, una vez dentro del campo de juego, el gobernador comenzó a pelotear con un nene que había asistido con una camiseta de Trinidad.