La presidencia de Sportivo no es cargo nuevo para Guillermo García, ya que en 1990 y cuando apenas tenía 36 años, se hizo cargo de la vida institucional de Desamparados al sustituir a Cámpora. Fue tan sólo un año, pero lo marcó tanto que 26 años después volvió a ser el principal titular. Tomó al máximo escalón de la comisión directiva el 28 de diciembre de 2007 tras la renuncia de Luis Moyano (García era el vice) para marcharse dos años después. Durante es lapso levantó las deudas contraídas por el club y fue pieza clave en la instalación del sistema de iluminación artificial. Ese periodo se marcó por un hecho sin antecedentes, cuando despidió al técnico Mauricio Magistretti a través de un mensaje de texto porque este no le atendía el celular al considerar que fue el culpable de no haber logrado el ascenso.
