El sobrepeso que tiene Mario Enrique Romero (38) lo tiene por estas horas internado en una cama del Hospital Español con una trombosis que de milagro no le costó la vida. Padece obesidad mórbida y su peso ronda los 220 kilos.

No puede trabajar y aporta al hogar con una pensión. Su mujer, Cinthia Brizuela (28), hace de todo para sostener la casa, la que comparten con 4 chicos (una de 13 hija de él, y uno de 5 y dos de 10 -mellizos- de ella). Cinthia amasa semitas y pan, que sale a vender con ayuda de sus hijos.

La calidad de vida de Mario es mala. Casi que no se puede mover, necesita ayuda para desplazarse y todavía ser joven lo mantiene de pie. El pasado martes, una hinchazón en su pie terminó con una trombosis. Primero fue a Urgencias del Hospital Rawson y luego logró recalar en el Hospital Español donde hay cuidados intensivos.

"Casi no la cuenta la última vez. Cada vez está peor y su vida se deteriora", contó la mujer de Mario. En el medio de este drama, Cinthia con que "vivimos de prestado" en una casa del barrio Echeverría en Concepción; "no se hasta cuando será".

Y agregó, "por el estado de Mario necesitamos una casa como la que entregan a los discapacitados, con baños grandes, que tenga un bidet, donde podamos meter una cama grande como para que esté cómodo".