‘Hasta que la gente se acostumbre, va a ser un lío todos los días. Es más, en la esquina de la Tucumán ya se pelearon porque un señor en auto casi atropella a otro que venía en moto y a contramano. Uno reclamó, los dos se bajaron y por poco no se fueron a los golpes’, contó Roberto Atencio, sobre la vereda de Esquiú a metros de Rioja. ‘Igual, está bien el cambio. Esta calle se había vuelto imposible de transitar’, agregó su hijo Diego. Ambos son vecinos de la Fray Mamerto Esquiú y en una pausa del trabajo graficaron la confusión y el caos que generó el nuevo sentido de circulación. Es que desde el lunes esa calle dejó de ser doble mano para correr de Oeste a Este, entre Santiago del Estero y avenida Rioja. Y pese a la señalización, hay automovilistas y motociclistas que siguen sin respetar la modificación.
Por pedido de los vecinos, la Municipalidad de la Capital accedió al cambio en esta calle para ordenar la circulación. Pero además adoptó otras medidas, como prohibir el estacionamiento del lado izquierdo. Para eso pintó de amarillo los cordones, colocó carteles de contramano en cada esquina y cambió las flechas en los carteles. Sin embargo, pocos lo respetan.
Las esquinas más conflictivas son los cruces con Mendoza, General Acha y Avenida Rioja, pues suelen encontrarse de frente los que vienen de Oeste a Este por Esquiú con los que giran en contramano. ‘Algunos alcanzan a frenar, pero otros siguen. Y eso que están los carteles de contramano. Supongo que será hasta que la gente se acostumbre’, contó Andrés Adroguer, un vecino.
‘Por ahora es un caos, pero hacía falta el cambio. La Esquiú ya se había convertido en una calle de mucho tráfico y muy angosta, por el estacionamiento de los lados’, dijo Matías Arce, empleado de un lavadero.
Por su parte, los vecinos pidieron que al menos por unos días haya personal municipal o policial que advierta del cambio de circulación.
El coordinador de Gabinete de la Municipalidad de la Capital, Juan Sánchez, expresó que ya evaluaban la medida. ‘Hacer de una sola mano la calle Esquiú fue concretar un pedido de vecinos. Y como llevará un tiempo que la gente se acostumbre, no descartamos enviar Monitores Urbanos a la zona, para realizar acciones informativas y de prevención’, dijo Sánchez.