-¿Cómo se vivió dentro del pelotón la fuga que llegó a tener cinco minutos?
-Con tranquilidad, porque sabíamos que en los últimos kilómetros se podía neutralizar. La carrera fue muy dura y había que regular.
-¿En la persecución tiraste algo?
-No en eso mi equipo se portó de manera magnífica se jugó por mí y les estoy muy agradecido.
-Fue un embalaje tremendo, ¿cómo se armó?
-Se me trabó el 11 (piñón) y tuve que embalar más cerca de la raya. Me tenía fe, me sentía bien y por suerte pude responder.
