�Máxima completó sus estudios en economía con un máster en EEUU y trabajó en distintas entidades bancarias como HSBC James Capel Inc, Dresdner Kleinworth Benson o Deutche Bank tanto en Nueva York como Bruselas.
Su profesión le ha permitido convertirse en asesora especial del secretario general de Naciones Unidas para las Finanzas de Inclusión para el Desarrollo, una tarea que desempeña con entrega y compromiso desde 2009.
La preparación para ser reina, que comenzó desde que se casara en 2002 con el príncipe heredero de Holanda, ha sido especialmente intensa, y Máxima consiguió aprender holandés en apenas tres meses. En casa de los futuros reyes de Holanda se habla holandés y también español, pues la futura reina habla en su lengua materna a las tres hijas del matrimonio: Catalina Amalia (nacida en 2003), Alexia (2005) y Ariane (2007). A partir de 1 de mayo el trato será de ‘majestad, reina Máxima.