Las boleadoras rodearon el cuerpo de dos percusionistas, al compás de los bombos legüeros. Con perfecto zapateo de malambo, sincronización en los ritmos y energía a más no poder, el comienzo del Carrusel del Sol fue un impacto profundo de percusión. Esto, porque el desfile de los carros esta vez fue abierto por Metabombo, un grupo de folclore fusión integrado por músicos de distintas provincias que hizo que el inicio estuviese bien arriba y con mucho ritmo. Los percusionistas fueron trasladados en el carro principal de la fiesta, luego de que las marionetas gigantes, una tradición de este evento, abrieran camino a los 25 carruajes que vinieron después.

Una hora y 40 minutos fue lo que duró el pasaje de todos los carros de los 19 departamentos y las distintas colectividades. Esto fue aplaudido por unas 120 mil personas sin parar y por las autoridades y celebridades que estaban en el palco oficial apostado frente al Centro Cívico.

Además del gobernador Sergio Uñac, el vicegobernador Marcelo Lima, y el diputado nacional José Luis Gioja, en el palco estaba el ministro del Interior, Rogelio Frigerio (es la segunda vez que visita la provincia en lo que va de febrero), la top model Sofía Zámolo, la periodista Marina Calabró y el conductor y modelo Iván de Pineda. Mientras que el conductor Roni Arias, de Canal 13, estuvo toda la noche recorriendo la avenida Ignacio de la Roza haciendo notas con la gente.

Otro de los momentos más aplaudidos fue cuando pasaron los deportistas sanjuaninos. El grupo, encabezado por Gonzalo Tellechea, estuvo conformado por Leonela Yúdica, Fabián Flaqué, Felipe y Valentín Vargas, Diego Elizondo y otros deportistas reconocidos. Sin embargo, el momento espontáneo lo pusieron los pequeños jugadores de hockey sobre patines, que fuera de protocolo, se abalanzaron hacia el palco para saludar a las autoridades.

Este año una de las cosas que más llamó la atención es que no hubo espuma. En ediciones anteriores, lo más criticado era que las candidatas y los bailarines de los séquitos tenían que sufrir los ataques con espuma en aerosol, típica en época de carnaval. También fue llamativo la cantidad de pequeños palcos que había a lo largo de la avenida. Estos pertenecían a algunos municipios. Así, los carruajes desplegaron todo su color y las candidatas mostraron su belleza. Con vestidos de distintos colores y diseños, las chicas pusieron todo en la noche previa a la elección. Entre carro y carro este año se sumó un séquito de bailarines. Cada cuadro estuvo relacionado con la temática elegida de cada departamento. Si bien el eje fue el Bicentenario de la Independencia, cada municipio interpretó esta idea y la adaptó a su tradición.