‘Después de la operación y cuando me dejaron entrar a la habitación, lo vi ahí, acostadito, dormido, sin el bracito. No aguanté, así que salí al pasillo y me largué a llorar’, confesó conmovida Noemí Sánchez. Ella es mamá de Ismael, el pequeño de 6 años que sufrió la amputación de su brazo izquierdo al meterlo en un secarropas en funcionamiento, y relató sus primeras impresiones tras el resultado menos esperado. Es que pese a los intentos médicos, el cuerpo de Ismael no aceptó el reimplante de la extremidad y tuvieron que extirparla pues su vida corría peligro. Ahora, el Hospital Garrahan le brindará asistencia psicológica no sólo a Ismael, sino a sus padres para afrontar la pérdida del brazo y el shock del terrible accidente.

El nene ayer presentó una mejoría y el Garrahan informó que incluso evaluaban retirarle el respirador artificial, aunque al cierre de esta edición seguía internado en Terapia Intensiva. ‘El brazo estaba muy dañado y además a Ismael no le ayudó mucho su problemita de salud. Él tiene un riñón más grande que el otro y por eso lo operaron el año pasado. Estuvo un tiempo además con una bolsita por afuera del cuerpo, para la orina. Los médicos me dijeron que no quedaba otra opción que sacarle el brazo porque sino se iba a seguir agravando su salud’, contó Noemí, quien desde el domingo cuando su hijo fue llevado al Garrahan no abandona el hospital. Allá, está acompañada por su pareja, José Díaz.

En la tarde del lunes, el cuadro de salud de Ismael se complicó y fue sometido a una tercera intervención quirúrgica, esa vez para retirarle el brazo reimplantado. ‘Lo empezaron a operar como a las cuatro y media de la tarde y salió tipo nueve. Él sigue dormido y por ahora los médicos no lo quieren despertar. Pero yo lo veo mejor, respira bien, tiene lindo color de piel’, apuntó la mamá.

En cuanto el niño despierte recibirá asistencia psicológica, una asistencia que también tendrán sus papás. ‘Los médicos me dijeron que mi marido y yo vamos a empezar con las sesiones. No sólo para poder explicarle a Ismael que ya perdió el brazo, porque sinceramente yo hoy no sabría qué decirle, sino para tratarnos porque vimos todo el accidente y nos dicen que aún seguimos shockeados’, informó Noemí. ‘A Ismael también lo van a tratar porque cuando despierte lo primero que va a preguntar va a ser por su brazo que ya no está más’, agregó.

Por otro lado, los profesionales del Hospital Garrahan son cautos en cuanto a la evolución del nene, aunque a Noemí le dieron una noticia alentadora. ‘Si Ismael mejora, a lo mejor dentro de dos semanas ya pueden empezar a pensar en el alta’, dijo.

En tanto, por ahora no hablaron de la chance de que Ismael utilice una prótesis. ‘Eso lo vamos a dejar para más adelante, según los médicos, pero es posible que lo hagamos’, cerró la mujer.