“En ningún momento renuncié”
En diálogo con el diario La Nación, Javier Cantero aseguró que sigue en su cargo; “Si me voy, no va a ser porque me presionaron o me amenazaron”, agregó.
Cantero desmintió así haber renunciado como presidente de Independiente en una jornada donde los rumores y los trascendidos comenzaron apenas unos instantes después de la derrota del lunes ante Sarmiento por 2 a 0 , el titular del conjunto de Avellaneda le confirmó en exclusiva a La Nación que se mantiene en su puesto, pese a todo.
-Al final, ¿qué pasó? ¿Renunció o no?
-En ningún momento. Fueron versiones periodísticas. Hoy (por ayer), con el avance de Internet, de Twitter, todo corre muy rápido, se generaliza demasiado, pero no fue así. Después del partido con Sarmiento, con esa sensación tan fea, y como Independiente tiene que ascender, plantee que si el impedimento para el ascenso era yo, daba un paso al costado. Faltan 12 fechas y, jugando mal, todavía estamos en los puestos de ascenso.
-¿Cómo maneja la presión, por ejemplo, el de una marcha en su contra?
-¿Quién la organiza? Tengo entendido que también está Bebote. Es lógico. Si me voy, no va a ser porque me presionaron o me amenazaron. Si el equipo está jugando así por mi culpa, sí. No tengo problemas en irme.
-¿Recibió algún llamado del Gobierno nacional?
-No. ¿Para qué?
-Para que no se fuera y le dejara el terreno libre a Hugo Moyano.
-No. Ninguno. Nadie me llamó. Sí quiero destacar a gente de la oposición que se me acercó por el bien de Independiente, como Peripolli (Mario) o Lascurain (Juan Carlos). Pensamos distinto, pero tenemos el mismo objetivo. Eso es muy positivo.

LAS PINTADAS
La sede de Independiente de Avellaneda apareció ayer con pintadas en sus paredes en contra del presidente Javier Cantero. “Cantero Pinocho”, “Cantero hijo de p…” y “Ascenso o Muerte”, fueron algunas de las inscripciones que se podían leer sobre la fachada del gimnasio Dr. Carlos S. Bottaro, en la parte trasera de la sede de Avellaneda. Esto se dio porque el “Rojo” sumó su octava fecha sin victorias en la B Nacional y, así, peligra su chance de retornar a la Primera División.