Con tres, de los seis embalajes ganados, el salteño Javier Salas se erigió como el mejor en la siesta de ayer. El piquetero contó que dejó “la vida” para mantener la fuga y que por fortuna las fuerzas lo ayudaron. “Las últimas 14 vueltas las hice de cabeza porque Tivani no me ayudó a tirar”, explicó. Luego destacó las cualidades de su joven adversario: “Es un chico muy fuerte de buenas condiciones, que hizo su carrera y lo entiendo”. Contó que apuntará sus afanes a la temporada de ruta. “He descansado bastante y creo que llegaré muy fuerte a las carreras de diciembre y enero”, amplió, lamentando que no tendrá a Luciano Montivero en el equipo: “El Pato nos ponía a su rueda y nos dejaba listos para embalar, lo extrañaremos”.