Pese a no ser puntualmente argentina -nació en el altiplano andino, hoy Bolivia, en los tiempos en los que el territorio nacional aún no estaba definido como tal sino que todo era parte del Virreinato del Río de la Plata- si se la considera parte de la Fiesta del Sol por sus valores libertarios americanos y su lucha constante por la independencia.
Juana Azurduy (nació en 1780) fue una patriota del Alto Perú, que acompañó a su esposo Manuel Ascencio Padilla en las luchas por la emancipación en el Virreinato del Río de la Plata contra el Reino de España. Era valiente y rebelde, había aprendido a cabalgar de la mano de su padre y no tenía reparos de enfrentarse con nadie. Por eso, no era de extrañar que ambos combatieran contra los realistas o que en 1812 se pusieran a las órdenes del general Manuel Belgrano, nuevo jefe del Ejército Auxiliar del Norte, llegando a reclutar 10.000 milicianos. Juana Azurduy también organizó el "Batallón Leales" que participó en la Batalla de Ayohuma, en 1813.
Por las luchas, sus tierras fueron confiscadas y hasta llegó a estar apresada con sus cuatro hijos. A la muerte de su esposo -en plena batalla en 1816- asumió la comandancia de las guerrillas que conformaban la luego denominada Republiqueta de La Laguna, por lo que es honrada su memoria en la Argentina y en Bolivia.
Murió en la absoluta indigencia el 25 de mayo de 1862 cuando estaba por cumplir 82 años y fue enterrada en una fosa común.
En el 2011, fue la primera mujer boliviana ascendida a Mariscala del Estado Plurinacional de Bolivia, el máximo grado militar en la categoría de oficiales.
