Con los pies en punta y las yemas de los dedos trabadas sobre la caja de vidrio, alumnos de 4 y 5 años de Media Agua trataban de ver los libros de hojas amarillas expuestos en medio de la Casa de Sarmiento. Sus ojos se movían rápidamente para captar todos los objetos. Y le dedicaban mucha atención al banco ubicado en la última sala del recorrido, que fue usado en la casa cuando sus habitaciones se transformaban en aulas. Esa postal se repite diariamente desde que comenzó el ciclo lectivo y hay turnos dados para que diversas escuelas visiten el museo hasta noviembre próximo. Es que este año se celebra el bicentenario del natalicio del prócer y, como nunca antes, ingresan cerca de 500 niños por jornada a la casona, que parece un aula nuevamente.
Desde fines de febrero, el silencio tradicional del museo cambió por las voces alborotadas de los niños, quienes inician el recorrido con timidez pero terminan preguntando y haciendo comentarios sobre todo. Los niños consultan sobre el telar de Doña Paula y sobre la cama de Sarmiento. Y uno de los objetos que más los atrae es el escritorio del Maestro. “¿Ahí hacía los deberes Sarmiento?”, preguntaba ayer uno de los nenes del colegio San Antonio de Padua, de Media Agua.
Otro espacio que los sorprende es la última sala, con una imagen gigante de Sarmiento y un televisor en el que se proyecta una película sobre su vida. “¡Seño, Sarmiento sale en la tele!”, decía allí otro de los nenes señalando la pantalla. Y mientras ellos hacían el recorrido, los niños del colegio Teniente Coronel Aramburu, de Rawson, esperaban para poder ingresar.
Los guardapolvos que ocupan todos los espacios de la Casa y las ocurrencias infantiles pueden verse diariamente. La directora del museo, Beatriz Oviedo, comentó que “desde el Ministerio de Educación solicitaron que los alumnos recibieran más información sobre Sarmiento este año, por el bicentenario. Por eso, las escuelas nos están visitando todos los días”. Y contó que “los turnos para las visitas de los alumnos están todos dados hasta las vacaciones de invierno y hay turnos solicitados hasta en noviembre. Es la primera vez que sucede esto”.
Si bien no hay cifras sobre la cantidad de niños que ya ingresaron al museo, las autoridades comentaron que entran cerca de 500 alumnos de primaria y secundaria por día. Además, Oviedo contó que las escuelas de zonas alejadas pueden pedir que vaya gente del museo a explicar la vida de Sarmiento con una obra de títeres y un video en el que se muestra toda la Casa.