Durante las 9 noches de la Novena en honor a Cristo Pobre, en la comunidad de Rawson que lleva ese nombre, los vecinos trabajaron sin descanso para colaborar con la organización de la Misa de Ramos que se realizó ayer. Es que este año, el inicio de Semana Santa coincidió con la culminación de las Fiestas Patronales del patrono del lugar. Ellos se encargaron hasta de limpiar el predio de la capilla y de adornar el templo para la celebración de ambos eventos que contaron con la participación de unos 100 fieles.
Después de las misas de la Novena, los vecinos de Cristo Pobre no se retiraron a sus casas, pese a que la mayoría debía madrugar al otro día para ir a trabajar. Tanto los hombres como las mujeres se quedaron para desarrollar diferentes tareas. Ellos se dedicaron a sacar los yuyos y piedras del predio que rodea la capilla para dejarlo completamente limpio. Y ellas se encargaron de confeccionar con papel crepé los gallardetes para adornar el templo. Ayer, también colaboraron con la organización de la Misa y la procesión.
Ayer, ni bien amaneció, las vecinas más cercanas a la capilla concurrieron al templo para comenzar a decorarlo. Lo primero que hicieron fue colgar los gallardetes en el techo y en las paredes. Luego, vestir las sillas que ocuparían los 11 chicos que harían la Primera Comunión. Les colocaron los cubresillas que alquilaron los padres de estos chicos para colaborar con la ornamentación del templo.
Luego del mediodía, otras vecina, se encargaron de recorrer cada casa de Cristo Pobre, para recolectar flores. Fueron las que luego colocaron al pie del altar y con las que adornaron la imagen de Cristo para la procesión.
La misma estaba programada a las 17.30, pero algunas vecinas llegaron media hora antes. Llevaron varios ramos de olivo para repartir entre quienes no tenían antes de que comenzara la procesión.
Como la capilla de Cristo Pobre tiene capacidad para no más de 30 personas, el sacerdote Juan José Leiva decidió instalar un altar en plena calle. Fue en la esquina de calles Punta del Monte y La Línea, para que todos los vecinos pudieran participar de la bendición de los ramos.
Posteriormente arrancó la procesión por las calles de Cristo Pobre, con la participación de las familias del lugar como de otras zonas del Médano de Oro. Durante la misma, los fieles rezaron por los enfermos, por los evacuados, por las personas que necesitan trabajo y por la Patria.
Tras media hora de peregrinación, los fieles regresaron al templo para participar de la Misa de Ramos.
Y esta vez rezaron para que Dios pusiera en su camino ‘corazones solidarios’ que colaboren con la construcción de un baño en la capilla, obra que aún los vecinos no pudieron concretar.

