�Matías Garrido (en la foto, al centro) cumplió el sueño de su vida al poder anotar no solo uno sino dos goles jugando en Primera División. Es que ayer, el volante creativo marcó los dos tantos de Patronato en la caída 2-3 ante Gimnasia en La Plata y por eso su felicidad no fue completa: “La verdad es que me voy con bronca porque no era lo que veníamos a buscar a nivel resultado. El equipo considero que hizo un buen trabajo en líneas generales, aunque nos quedamos con las manos vacías. La idea es jugar siempre de igual a igual en cada cancha donde vayamos y hoy (por ayer) se cumplió. Lógico que debemos ajustar algunas cosas para sumar puntos”, sintetizó el ex Peñarol y Desamparados.