El Real Madrid lejos estuvo de mostrar esa imagen señorial que lo llevó a ser considerado la Casa Blanda del fútbol mundial. Luego del 3-2 de Messi, un patadón de Marcelo a Fábregas junto al banco de suplentes provocó la roja al brasileño y una sucesión de empujones y golpes. Incluso Mourinho participó de la contienda y lo hizo con un golpe a la cara del ayudante de campo de Guardiola, Tito Vilanova. Uno que se mostró sacado fue Gonzalo Higuaín, quien resultó frenado por Javier Mascherano.