Hoy inicia Wimbledon, el único Grand Slam que no tiene campeones argentinos, algo que para David Nalbandian, finalista en 2002 no tiene necesariamente por qué seguir así. “Wimbedon ya no es lo que era antes. La superficie es más lenta, permite peloteos, y eso podría servir para que muchos jugadores argentinos se saquen de la cabeza la idea de que no se puede. Hay que intentarlo y estoy seguro que en el corto plazo un argentino lo va a ganar”, dijo el cordobés.

“Lo complicado de este torneo es que hay muy poco tiempo para prepararse para esta superficie, y además la lluvia hace que tengas menos posibilidades aún” señaló David, quien quiere repetir lo del 2002.