Las indefiniciones en el macrismo sanjuanino en torno a quién es en la actualidad el presidente de la fuerza, continúan presentes. Ayer, Wbaldino Acosta Zapata dijo que él es el titular del PRO en la provincia con mandato hasta el 2011 y cuestionó con duros términos al grupo de dirigentes que a fines del año pasado intentó desplazarlo del cargo. Dijo que fue designado “por voluntad de los afiliados sanjuaninos” y que la reunión para intentar desplazarlo “fue un capricho de Jorge Macri que todavía no sabe que a las autoridades las eligen los afiliados”. Un grupo de dirigentes opositores encabezado por Hugo Ramírez y Eduardo Cáceres se reunió a fines de diciembre en un hotel céntrico con la presencia de César Torres, del riñón de Jorge Macri, y firmaron un acta en la que le revocaron el mandato a Acosta y designaron al propio Ramírez como coordinador transitorio. El argumento fue que la fusión con Recrear ordenada por las autoridades nacionales obligaban a hacer cesar los mandatos y armar una conducción temporal hasta elegir autoridades del nuevo partido. Pero ayer Acosta dijo que “Jorge Macri se equivoca porque vino a complicar la vida en San Juan. Acá no habían internas hasta que apareció este hombre que se dedica a generar sus propios dirigentes en la provincia y eso no es la nueva política del PRO”. Macri sostuvo que “no tengo presente hoy si el presidente es Acosta o Ramírez, cualquiera de los dos son referentes importantes en la provincia. Sí hay que avanzar hacia una fusión con Recrear y conformar nuevas autoridades”. Ramírez fue cauto y sostuvo que “a mí me designaron como coordinador, pero entiendo que Acosta es el presidente”. Si continúan las indefiniciones, fuentes partidarias no descartaron que pueda venir una intervención ordenada desde la conducción central para el PRO en San Juan. La interna local trascendió en noviembre del año pasado, cuando sonaron por lo bajo algunas críticas a Acosta. Los dirigentes María Eugenia Raberta y Eduardo Cáceres lo tildaron de “autoritario”, de no ayudar a la unidad partidaria y se lo hicieron saber a Jorge Macri en una reunión en Mendoza. Ahí empezó una larga serie de desencuentros que todavía no tienen fin.