Pablo asomó la cabeza por la ventana de su vivienda, ubicada casi a la mitad de la villa Belgrano, en Santa Lucía. Quería saber si ya era posible salir, o si el callejón seguía anegado a causa de la lluvia que cayó durante casi toda la madrugada y parte del día domingo. "Adentro se me llovieron los muebles y también se metió un poco de agua de la calle", dijo, mientras miraba hacia los costados para saber cómo les había ido a sus vecinos. La situación a lo largo del angosto pasaje era una sola: techos a punto de colapsar, paredes de adobe muy afectadas y casi nada de espacio para transitar entre el paredón de la fábrica que limita con la villa y las precarias viviendas.

"Acá cuando llueve siempre es lo mismo", se quejó Pablo, mientras improvisaba un puente sobre los charcos con adobes y algunas tablas. La villa Belgrano es un asentamiento habitado por 16 familias, la mayoría con chicos, que está ubicada detrás de la fábrica de Guardapolvos Argentinos, en Santa Lucía. "Como nadie nos ve, es como si no existiéramos", se quejó Graciela, que pasó la noche vigilando que el agua no mojara los colchones donde duermen sus hijos. "Para colmo, anoche saqué 5 vinchucas de adentro de la casa. Ahí las tengo, encerradas en un frasco", contó.

Casi al final del callejón, donde la villa asoma apenas a la ruta 20, la vivienda donde habita una pareja de ancianos quedó muy comprometida. Tanto, que tuvieron que sacar los pocos muebles al patio e irse a la casa de unos parientes, porque se cayó una pared justo donde ellos duermen. "Son gente mayor, se llevaron un gran susto. Entre los vecinos los hemos ayudado a apuntalar lo que queda de pared y el techo, que parece que ya se viene abajo. Pero aquí todas las casas están en las mismas condiciones", contó Carina, quien habita en una de las viviendas más precarias con sus hijos y nietos. Por la noche, cuando vio que la lluvia se colaba por todos los rincones, tuvo que correr las camas y colchones hacia el medio del rancho, para que no se mojaran tanto. "Es que además de la lluvia, hacía frío. Esta humedad va a terminar enfermando a los niños", se lamentó la mujer. Otro vecino, Juan, se acercó para comentar que "hemos hecho un expediente en el IPV para que nos pongan en algún barrio, pero nos han dicho que el que tiene que pedir eso es el intendente de Santa Lucía. ¿Cómo va a saber de nosotros el intendente, si ni siquiera viene por acá", aseguró el hombre.

Mientras el pronóstico del tiempo indica nublado parcialmente para hoy lunes y mañana martes, pero con nuevas lluvias para el próximo fin de semana, el pluviómetro del Servicio Meteorológico Nacional con asiento en Las Chacritas volvió a registrar un récord: 8 mm de lluvia caída desde las 3 de la mañana hasta el mediodía, el doble de lo que cayó en todo enero de 2010, cuando las lluvias apenas alcanzaron los 4 mm.